LA INVASION TATOO
Mucho peor y probablemente más perdurable que el desembarco pokémon, es la invasión de los tatoos.
El último abducido ha sido Messi. Basta ver como sus cotizados triceps sobreviven asfixiados entre motivos y tinta permanente cada vez más expansiva.
Habría que preguntarle a este respecto a otra víctima conocida por todos- ahora convaleciente- como ha sido Melanie. A ella le ha costado sudor y lágrimas borrarse el corazón de Antonio del antebrazo ...
También los dermatólogos sufren consultas abarrotadas de jovencitas/os arrepentidas/os que quieren extraer de su piel y su vida a quien hace tres meses juraban amor eterno. A eso se le suma un sinfín de padres resignados que pagan los desperfectos causados por tal singular y sangriento arrebato romántico.
Aun así, el número de partidarios va en aumento.Y por más que lo pienso, no acabo de verle el punto al tema.
Entiendo que quien decide señalarse lo hace por una identificación absoluta hacia aquello que muestra. Se hace una sola piel - nunca mejor dicho -con la filosofía oriental, un nombre , un hito deportivo o figuras animales varias.
Además lo consideran atractivo.
Reconozco que cuando la epidermis es tersa y turgente, póngase lo que se ponga ya sea serpiente o enunciado comercial, tal recuerdo puede resultar incluso seductor. Sin embargo el paso del tiempo afecta a todos y con el peso de los días esa carne prieta acaba desparramándose sin control...Las líneas perfiladas del diseño en cuestión empiezan a perder precisión y sentido.
Angelina Jolie es guapa con tatuajes pero cuando cumpla 65, incluso a ella, los años le pasarán factura!
El tatoo lover probablemente entienda que sus grabados son, sobre todo, señales de identidad. Al cuerpo que se ha encontrado o le ha sido dado - según posicionamiento existencial de cada uno- añade su sello personal.
Es probable que en cierto modo sea así pero, salvo que se me escape algo del fondo, parece más prudente trabajar la singularidad desde el interior de cada uno que hacerla depender de pulso ( y destreza) de otro.
La necesidad de perpetuarse es el quid de la cuestión. Y esa es una inquietud común a todo mortal. Conviene, en todo caso, acertar con los valores perdurables que te definan.
Cuánto duele- y cuánto cuesta - grabarse todo recordatorio. Y¡ cuánto más borrarlo!.
Si te tatúas hazlo con motivos que dirijan la mirada a lo lejos...
Nunca te tatúes el cuerpo sin tatuarte el alma.
Es el único sustrato verdaderamente subsistente que mantiene la forma -incluso mejora- con el tiempo.
Nuevamente los argentinos vienen con matices..
Igual a mi discurso le falte rock and roll....
El último abducido ha sido Messi. Basta ver como sus cotizados triceps sobreviven asfixiados entre motivos y tinta permanente cada vez más expansiva.
Habría que preguntarle a este respecto a otra víctima conocida por todos- ahora convaleciente- como ha sido Melanie. A ella le ha costado sudor y lágrimas borrarse el corazón de Antonio del antebrazo ...
También los dermatólogos sufren consultas abarrotadas de jovencitas/os arrepentidas/os que quieren extraer de su piel y su vida a quien hace tres meses juraban amor eterno. A eso se le suma un sinfín de padres resignados que pagan los desperfectos causados por tal singular y sangriento arrebato romántico.
Aun así, el número de partidarios va en aumento.Y por más que lo pienso, no acabo de verle el punto al tema.
Entiendo que quien decide señalarse lo hace por una identificación absoluta hacia aquello que muestra. Se hace una sola piel - nunca mejor dicho -con la filosofía oriental, un nombre , un hito deportivo o figuras animales varias.
Además lo consideran atractivo.
Reconozco que cuando la epidermis es tersa y turgente, póngase lo que se ponga ya sea serpiente o enunciado comercial, tal recuerdo puede resultar incluso seductor. Sin embargo el paso del tiempo afecta a todos y con el peso de los días esa carne prieta acaba desparramándose sin control...Las líneas perfiladas del diseño en cuestión empiezan a perder precisión y sentido.
Angelina Jolie es guapa con tatuajes pero cuando cumpla 65, incluso a ella, los años le pasarán factura!
Es probable que en cierto modo sea así pero, salvo que se me escape algo del fondo, parece más prudente trabajar la singularidad desde el interior de cada uno que hacerla depender de pulso ( y destreza) de otro.
La necesidad de perpetuarse es el quid de la cuestión. Y esa es una inquietud común a todo mortal. Conviene, en todo caso, acertar con los valores perdurables que te definan.
Cuánto duele- y cuánto cuesta - grabarse todo recordatorio. Y¡ cuánto más borrarlo!.
Si te tatúas hazlo con motivos que dirijan la mirada a lo lejos...
Nunca te tatúes el cuerpo sin tatuarte el alma.
Es el único sustrato verdaderamente subsistente que mantiene la forma -incluso mejora- con el tiempo.
Nuevamente los argentinos vienen con matices..
Igual a mi discurso le falte rock and roll....
Pues yo estoy a favor de que se tatúen otros, y contra más, mejor. Estoy deseando ver esos tatuajes cuando las carnes trémulas y añiles desfiguren el altivo andar de algunos tatuados de hoy. Allí estaré yo, sentado con mi aperitivo veraniego, en el chiringuito de la playa de turno, contemplando como la fatuidad se convirtió en ñoña y su contemplación en risa disimulada.
ResponderEliminar