Esto va de libertad

Iniciada la campaña electoral en España, también inicio mi cruzada particular.
No hablo de partidos pues, como tantos, no tengo en absoluto claro a quién entregar mi voto.
Me incluyo en el gigantesco grupo de los indecisos.
Pero sí hablo de libertad, de dignidad y de sentido.
Pues bien, estas elecciones son fundamentales para el futuro. El juego de pactos - en realidad de tronos- tendrá consecuencias determinantes para nosotros y las siguientes generaciones. Es precisamente por eso por lo que no voy a callarme.
Mis lectores son tan listos que sacarán sus propias conclusiones.
Aun teniendo dificultades serias para elegir candidatura, hay cosas que tengo claras.
"Va de llibertat"  es uno de los slogans electorales -por cierto, acertadísimo-  que, como ha ocurrido con el color amarillo, algunos pretenden hacerse suyo.
Pero es que no sólo va de eso.
También va de convivencia entre distintos, de altura política, de dignidad parlamentaria, de cumplimiento de las leyes y marco de convivencia comúnmente establecido. En definitiva esto va de lograr el bien más preciado: la paz social.

Hace 5 días en la Universidad Autónoma de Barcelona se produjo un acto absolutamente lamentable de ataque a la libertad de movimiento y de expresión contra aquellos que se atreven a discrepar del estilo de pensamiento monolítico xenófobo y defender la Constitución española en la Universidad . "S 'ha acabat, es un grupo de estudiantes con suficiente arrojo como para atreverse a plantar cara al radicalismo independentista que no deja espacio al debate abierto ni a la discrepancia en un entorno donde, supuestamente, las ideas todas tienen lugar.

Otro grupo de jóvenes como ellos les esperaba, desafiantes, intentando impedir el acceso de Cayetana Alvarez de Toledo al interior de la Universidad. Su único propósito: pronunciar una conferencia.

Y pudiera ser que para ellos Cayetana sea demasiado: demasiado guapa, demasiado rubia, demasiado lista, demasiado  preparada. Pudiera ser que esperaran que hablara en catalán. Tal vez su imagen de  sutil prepotencia fuera la que impidieran una conexión fácil pero en un aforo del dialogo constructivo como es la universidad- por cierto, pagada entre todos-  cualquier interlocutor merece respeto. En este caso, además, el discurso es impecable, elaborado desde la razón no desde fanatismo.
Y es eso lo que no soporta la turba exaltada que necesita rodearse y alimentarse de mediocridad y mentiras. Un radicalismo que rechaza que cualquier argumento y que reciben la dialéctica como una bofetada directa a la zafiedad y violencia. Su repuesta frente a la palabra es el insulto; frente al atrevimiento la peineta; frente a la presencia, el empujón.

Lo peor es que no se trata de un hecho puntual.

Anteayer lo vimos en Errentería. Esta vez no eran tan jóvenes y esta vez la calle es el escenario de la afrenta. Señores, entraditos en años, insultando gratuitamente a Maite Pagazaurtundúa.
También Inés Arrimadas, Rosa Díez entre otras, han pasado por ello. Mujeres a las que se les silencia la boca por manifestar su negativa a la corriente imperante de pensamiento...
Pero que no se confunda nadie. Esto , ahora, no va de reclamar espacio para las mujeres. Esto va de oxígeno vital para respirar en libertad seas quién seas, seas cómo seas, seas lo que seas.