De tú a tú, con mi otro yo.

Cuando empecé a escribir, algún amigo más temeroso que prudente, me advirtió de los peligros que corría al  contar y exponer opiniones tan abiertamente propias.

Pues bien, decidí asumir el riesgo (que por el momento no asoma) y estoy encantada de haberlo hecho. 

En primer lugar  porque de no atreverme, hubiera sufrido una úlcera de estómago por callarme más de lo debido. 

A eso hay que sumarle que escribir es para mi en cierto modo terapéutico. Algunos me agradecéis un artículo cuando en realidad soy yo la que debería hacerlo.  Sin vosotros lectores la fórmula magistral no es posible.

Además, a veces te llevas sorpresas que de ningún modo podrían haber ocurrido como la que hoy os traigo y que me permito compartir ( con el permiso de su protagonista)

Acabo de recibir este mail. Lo ha reenviado mi hermano...

Podría firmarlo yo. Pero en realidad no. Porque no soy quien lo escribe -pero sí quien lo suscribe-.

Hace un tiempo su autora, Angeles  Montuenga me encontró ( en realidad, a esa parte de mi que es este blog) entre las voces que con su nombre aparecían en Google!

Y lo que son las cosas, una inesperada coincidencia con mi hermano aclaró el asunto..Compartiamos nombre, parentesco lejano y  sangre procedente de Calatayud.

Así que las líneas siguientes podrían ser mías  y en parte lo son.

Gracias por tus palabras, Angeles Montuenga.!!!!

Atentamente:        

                               Angeles Montuenga

Buenas tardes Luis:

No se si me recordarás, soy la "otra" Angeles Montuenga y me atrevo a escribirte porque me ha conmovido lo que tu hermana ha escrito en su blog sobre la enfermedad  de vuestra madre.

Lo primero que me surge es decir: ¡¡Animo!!
Y lo siguiente, aunque pueda sonar muy extraño,pero estoy convencida de lo que digo:
Disfrutadlo, disfrutadla,...

Yo lo he vivido, de forma muy próxima, en dos ocasiones:
Con mi abuela, cuando yo tenia 21 años y " no me quedo otra"...
Con mi suegra, cuando ya tenia 40, y durante 5 años, el fin de semana que me tocaba pasar con ella lo consideraba un privilegio.

En ambos casos fue una oportunidad de poder "darnos"y de ver la vida desde una nueva perspectiva.
Y tengo la sensación, de que al igual que la de ellas, la dimensión de tu madre es excepcional.

Ahora tienen todavía más sentido las palabras con las que tu hermana
se despedia en el blog a finales de Julio:
" Me busquéis o no , en septiembre vuelvo a la carga y a la contra".

Dejadme que os envíe un abrazo y mucha fuerza.

Angeles Montuenga

La canción no podía ser otra. !!