A pecho descubierto
La semana pasada, al llegar a los estudios de Radio Estel en Barcelona, donde dirijo el programa “Paraules d’amor”, pude comprobar en primera persona el rastro- que no el rostro- de los violentos. La noche del martes se lanzaron con precisión, saña e insistencia diversos objetos destrozando las ventanas del local.
Era ¿ la respuesta? a la posición que desde los micrófonos de la emisora - entre otros de nuestro espacio- se manifestaba acerca de la defensa del no nacido.
No soporto las respuestas arbitrarias, ni la manipulación… Nada más lejos que doblegarme ante quienes pretendan discriminar por razón de sexo.
Tampoco me asustan las amenazas e insultos… Sólo temo a la mentira y a la injusticia.
En ese sentido, no puedo entender a los que consideran la actitud de protección de la vida del no nacido- inocente e indefenso- como una vejación hacia la mujer y su dignidad.
Una vida que irrumpe rasgando el telón del tiempo y el espacio, es una realidad que se impone. Nos guste o no.
A partir de ese instante fecundo, tal existencia irrepetible, palpitante y minúscula comienza a abrirse paso en nuestro universo. “Irremediablemente”, él o ella ya Es . Tal abismo produce vértigo. Conozco esa sensación abrumadora. Como madre, la he experimentado varias veces .
Por eso, aun siendo abiertamente beligerante respecto a la defensa de la condición femenina, siento “vergüenza de género“ cuando contemplo a mujeres como yo que utilizan la violencia y la agresión más burda para reclamar sus derechos.
¿Su derecho al aborto?¿Cuál es el bien jurídico a proteger…?
El aborto no es sagrado…
La vida –la tuya, la suya, la mía- sí lo es. ¡¡Ese es el único derecho no disponible!!!!
A ti, mujer del Femen, ( o partidarias) que crees que tu lucha es justa y necesaria, quisiera proponerte un pacto.
No te ocultes bajo caretas, ni juegos escénicos innecesariamente desagradables para los que los sufren.
Hablemos a pecho descubierto. De mujer a mujer.
Convénceme de que esa vida humana no lo es y me atreveré a luchar a tu lado.
Me dejo encarcelar contigo. ( A lo de la desnudez no me comprometo… Soy una chica decente y eso no va del todo conmigo).
Estoy segura de que si buscamos honradamente la verdad, llegaremos a descubrirla.
Cualquiera que lea este artículo y quiera conversar, aquí estoy.
¡Hablemos!
hijamujerymadre@gmail.com
El video resulta un contrapunto muy inspirador. Es el padre quien habla y quien honra al hijo. El también cuenta.
El video resulta un contrapunto muy inspirador. Es el padre quien habla y quien honra al hijo. El también cuenta.
¡bárbara !. un post bárbaro, claro, concreto y conciso.
ResponderEliminarme encanta.
Sigo a tope con tu madre.
un abrazo
Cristina M.
Hay vídeos que te hacen llorar ... aunque sea de compasión y alegría.......
ResponderEliminarQue bonito¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡