Eurovisión nos ha dejado sin música


Tal vez mi pasado folklórico (buena parte de mi infancia transcurrió entre discos y escenarios) me permite posicionarme, al menos con algo de conocimiento de causa, en el tema que me ocupa hoy.

Pues bien, el pasado sábado me asomé con cierta curiosidad al Festival de Eurovisión. Recuerdo un tiempo en el que tal acontecimiento televisivo, era plan familiar obligatorio.
Lo que encontré- confieso que no pude resistir hasta el final- fue una feria, un desfile de intérpretes grotescos en lugar de un festival de artistas y voces regalando su talento y su música ante una inmensa audiencia.
El espectáculo resultó literalmente dantesco. 

Una orquestada propuesta de entretenimiento, sombrío e infernal, cargado de histriónicas performances, abanderando la ideología de género, la provocación gratuita y la hiper sexualización.  
No creo que fuera casual el uso del color en la iluminación escénica combinando continuamente los tonos de la bandera del movimiento trans (rosa, azul y blanco). 
No creo tampoco que nadie obviara el uso de bragueros de look sadomasoquista, las repetitivas coreografías excesivas y obscenas. No vi látigos, eso es verdad.
Irlanda invocó al demonio y la Ouija. Su representante se identificaba como bruja.
España presentaba a una zorra con bailarines enfundados en cueros.
El finalista suizo- según su propias palabras, un ser no binario- en la repetición de la canción ganadora, apareció con la corona de espinas.
Y la mujer barbuda actuó de telonera.

Los espectadores de un festival de esta importancia esperanun show del talento en lugar de un conjunto de actuaciones delirantes y mediocres. Merecen mucho más que sonidos estridentes, gritos y bailes a golpes de cadera.
Hemos sido testigos obligados de una profanación de algo tan sagrado como la cultura. 
Me parece, además de una falta de decencia profesional, una falta de respeto hacia el público.
¡Cómo hemos añorado a Salvador Sobral, a ABBA, a Mocedades, Peret,  Celine Dion, Salomé y tantos otros! ¡Cuánto nos evoca un lejano "Save your kisses for me" "Aleluya" o el más reciente" Fary tale"!

Eurovisión nos ha dejado sin música.
Esa que toca el corazón, que consuela, que puede hacerte saltar a bailar, que te lleva a venirte arriba, entonando estrofas y estribillos, bajo la ducha y mientras conduces, que te ayuda a ser feliz, que te cambia el día, con la que celebras, recuerdas, amas, consuelas y agradeces la dicha de vivir o haber vivido.

Eurovisión se ha quedado sin música (también sin bandera!) porque Europa se está quedando sin identidad ni alma .

Y aquí la canción del post. No podía ser otra.
Lo vais a entender.





Comentarios

  1. Totalmente de acuerdo.
    Yo te recuerdo de pequeña con tu familia NINS, y cuánto disfruté. Y pude compartir contigo ratos en Goimendi.
    Dónde se ha ido lo normal?
    Yo sigo peleando por su éxito, el de la normalidad..
    Lo que fuimos y seguiremos siendo

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  2. Comparto plenamente tus comentarios . Añadiré que lamentablemente dos periódicos tan importantes como La Vanguardia y El País elogiaron a la canción e interprete triunfantes . Del País es esperable conociendo su linea ideológica habitual pero que la Vanguardia se haya incorporado a esta basura es indignante . no comprendo como el Conde no ha echado ya al actual Director

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