Galante al volante
En su momento, pensé que la credibilidad de un blog exigía no hacer uso de publicidad en sus páginas.
Hoy, sin embargo, hago una excepción: "Simón Marín. Taxista de Barcelona".
La nuestra fue una carrera muy corta. Tal vez el tiempo pasó volando.
Iba yo arrastrando por la calle un paquete pesado y, ante la amenaza de lluvia, decidí acudir en ayuda del servicio de transporte metropolitano.
Inicié el viaje sin más comentario que la dirección de destino.
Absorta en la bandeja de entrada de los mails, de pronto oí un: -"Qué tal va el día, joven?-"
No sé si fue por el tono optimista o tal vez por lo de "joven" pero Simón, el conductor, consiguió captar mi atención.
Levanté la mirada hacia el retrovisor. Sus ojos sonreían.
Empezamos con la charla.
Hablamos de trabajo, de espíritu positivo , de las crisis de verdad- "las de comer habichuelas , patatas o pan duro sin oreja ni tocino"- , de la hora de las existencias, sin máscaras de exceso.
Hablamos de familia. Sus nietas -"¿Cómo no voy a estar contento teniendo estos dos soles?".-
Muestra orgulloso sus fotos.
Turno de presumir para la pasajera :
"Tengo 5 hijos".
Incredulidad de inicio.
Aparece entonces el caballero que muchos de hombres de bien llevan dentro y comienza a explayarse : "¡Cómo es posible!. "Si me lo permite le diré que está Ud. de muy buen ver!!"
"¡ Quien lo diría! ".
No le interrumpí.
Sobreabundó en mi hermosura y dejé continuara con tales lindezas.
Preguntó si mi marido me piropeaba bastante.
-"Últimamente menos de lo que debiera o necesito!!!"- contesté
Un breve silencio. Se acercaba el final del trayecto.
Dice entonces : " -Déjeme llevarla un poco más lejos-" .
Para el taxímetro .
Estaciona en la esquina siguiente.
Pago y - agradecida ante tanta galantería- redondeo hacia arriba.
Simón contesta: -"No acepto esta propina. Lo que le he dicho ha salido del corazón , no hay interés comercial alguno. Es más estoy dispuesto a firmar por escrito todo lo que acabo de afirmar".
En un arrebato de compromiso con su palabra, coge la hoja de recibos y escribe lo siguiente:
Gracias Simón por hacer la vida un poco más agradable a los que le acompañan.
Esta es música que me inspira el post y gente como Ud.
Hoy, sin embargo, hago una excepción: "Simón Marín. Taxista de Barcelona".
La nuestra fue una carrera muy corta. Tal vez el tiempo pasó volando.
Iba yo arrastrando por la calle un paquete pesado y, ante la amenaza de lluvia, decidí acudir en ayuda del servicio de transporte metropolitano.
Inicié el viaje sin más comentario que la dirección de destino.
Absorta en la bandeja de entrada de los mails, de pronto oí un: -"Qué tal va el día, joven?-"
No sé si fue por el tono optimista o tal vez por lo de "joven" pero Simón, el conductor, consiguió captar mi atención.
Levanté la mirada hacia el retrovisor. Sus ojos sonreían.
Empezamos con la charla.
Hablamos de trabajo, de espíritu positivo , de las crisis de verdad- "las de comer habichuelas , patatas o pan duro sin oreja ni tocino"- , de la hora de las existencias, sin máscaras de exceso.
Hablamos de familia. Sus nietas -"¿Cómo no voy a estar contento teniendo estos dos soles?".-
Muestra orgulloso sus fotos.
Turno de presumir para la pasajera :
"Tengo 5 hijos".
Incredulidad de inicio.
Aparece entonces el caballero que muchos de hombres de bien llevan dentro y comienza a explayarse : "¡Cómo es posible!. "Si me lo permite le diré que está Ud. de muy buen ver!!"
"¡ Quien lo diría! ".
No le interrumpí.
Sobreabundó en mi hermosura y dejé continuara con tales lindezas.
Preguntó si mi marido me piropeaba bastante.
-"Últimamente menos de lo que debiera o necesito!!!"- contesté
Un breve silencio. Se acercaba el final del trayecto.
Dice entonces : " -Déjeme llevarla un poco más lejos-" .
Para el taxímetro .
Estaciona en la esquina siguiente.
Pago y - agradecida ante tanta galantería- redondeo hacia arriba.
Simón contesta: -"No acepto esta propina. Lo que le he dicho ha salido del corazón , no hay interés comercial alguno. Es más estoy dispuesto a firmar por escrito todo lo que acabo de afirmar".
En un arrebato de compromiso con su palabra, coge la hoja de recibos y escribe lo siguiente:
Gracias Simón por hacer la vida un poco más agradable a los que le acompañan.
Esta es música que me inspira el post y gente como Ud.
Simón no dijo mas que la verdad. El otro dia, cuando jugábamos con los franceses y les dije que tenias cinco hijos, vi en sus ojos admiración. Bss
ResponderEliminarViva Simon y toda la gente que regala sonrisas y simpatia!!
ResponderEliminarHay alguieeeen poooor aahiiii aariiiibaaaa?
ResponderEliminarVaya, decir verdades esta de moda, no?
Genial el video, muy bien actualizado sin perder sus señas de identidad.
genial!!!!!!
ResponderEliminarAngelita tienes que escribir una novela, tus relatos son fantasticos.
Gracias por vuestros comentarios.
ResponderEliminarUna amiga me ha dicho que a partir de ahora usará más el taxi como medio de transporte . Tiene esperanzas de encontrar a un" Simón"!! ( No me extraña!)